Un transatlántico en manos de incompetentes

 Después del mastodóntico fiasco de la temporada 19/20 y sin solución de continuidad, nos encaminamos a la 20/21 con una sensación bastante diferente a la que nos suele rondar por la tripilla a los Zaragocistas cuando la pelota se echa a rodar por los estertores del verano vacacional. 

 La marcha de Víctor Fernández culminando el séptimo fiasco consecutivo en el pozo de la segunda, parecía dar paso al mantenimiento de un proyecto que estuvo cerca del objetivo, y que se baso en el intento de buen fútbol, marcado por el "buen pie" y el toque de balón, siendo encabezado por un puñado de expertos futbolistas rodeados de un buen grupo de canteranos con el escudo del león grabado en el pecho.

Pues del proyecto que a punto estuvo de lograr el éxito, comenzamos a desmantelar sentimiento, con la mayoría de canteranos regalados o mal vendidos, fichando melones ofrecidos por un tenderete ambulante de mala feria y manteniendo lapas inertes con poca intención de cambiar su estado de actividad.

Toda esta "magnífica" planificación solo puede desembocar en un fisco colosal donde los responsables, que tienen claro nombre y apellido, parecen disfrutar con el juego de la silla y Sevilla, para contemplar quien es el Tontico que se queda antes sin silla.  Ahí están Lalo, Cuartero, Lapetra y Alierta dando vueltas sin percatarse que no hay sillas, y ya no vale que solo uno se quede sin silla.  Las circunstancias afortunadamente han marcado que el momento de la verdad ya ha llegado, a ahora no valen medias tintas.

Las decisiones deben llegar, si no quiere perder mas dinero el que nunca las ha querido poner.  Permitir que incompetentes sigan jugando con tu dinero es duro de asumir, ¿verdad Sr. Alierta?

¡¡¡ Al toro !!!