y ahora, ¡calma!

Se han disputado cuatro jornada de esta liga 2019/20 y, poco a poco nuestro Zaragoza se ha ido instalando en la zona noble de la clasificación, siguiendo una trayectoria en clara evolución hacia la consistencia y la solvencia.

Frente al Tenerife el equipo fue timorato y dubitativo, dando en muchos momento muestras de desajuste y evocando viejos y desagradables tiempos.  Se mejoró notablemente en el Bierzo donde el equipo tuvo mas y mejores momentos, e incluso algunos baluartes comenzaban levemente a hacerse notar.  Contra el Elche se hizo un partido completo pero con muchos problemas en la transición y la llegada.  También algo romos en ataque.

El pasado domingo en Alcorcón se pulverizaron todos los registros en cuanto a eficacia, eficiencia, pegada, control y dominio de los tiempos.  Un Zaragoza apabullante borró del mapa durante mas de 80 minutos al equipo Madrileño, que en ocasiones veía como cada intento de atacar los flancos de la escuadra blanquilla eran respondido de inmediato con fiereza y desparpajo.  Un partido completo e incontestable.

Pero ojo;  ya saben que LO DIFÍCIL NO ES LLEGAR, SINO MANTENERSE.  En vistas del nivel mostrado por nuestros jugadores en Alcorcón, es de esperar que seamos cabales y tengamos claro que hemos presenciado un partido que resultará muy complicado igualar o superar.  

Si lo que viene a partir de ahora empeora lo visto, MUCHA CALMA, porque la competición se va a hacer muy larga.  En estos días resulta redundante recordar las sensaciones que teníamos hace un año al salir de Oviedo, y bien sabemos que al final tuvimos que pedir la hora para no desaparecer.

Calma, mucha calma y a seguir disfrutando.