Si hace una semana estábamos a la puerta de la gloria, el pasado sábado nos llevamos otro inesperado y antológico portazo en los morros, lo que nos ha dejado sumidos durante un buen puñado de amaneceres en una depresión difícil de superar.
¡¡¡ QUE AFICIÓN DIOS MÍO !!!. Me gustaría ver cuantas aficiones son capaces de hacer lo que protagonizamos el pasado sábado en la Romareda; 90 minutos antes del partido recibiendo a los futbolistas, 90 minutos después animando sin descanso y tras la dolorosísima derrota, la Romareda en pie cantando el himno a capela y despidiendo entre aplausos a los protagonistas.
El personaje que mal dirigió durante muchos partidos los designios tácticos del club ha salido como lo hacen las ratas cuando barruntan problemas; y es que, al final ha quedado demostrado que este club, esta afición y esta ciudad le ha venido muy grande a tan pequeño personajillo. Toda la paciencia que tanto club como entorno hemos tenido con su galopante muestra de incapacidad, lo paga con una huida digna de los mayores escapistas del mundo de la farándula. Pintoresco personaje el vasco de Vitoria. Que te vaya bonito en Coruña; Mi apuesta es que no te comes los turrones allí.
Todo se pasa, y en menos de una semana, con el ruido de la promoción acallado por los goles de España, la ilusión de este renacido Zaragocismo volverá a brotar, por fortuna para todos
ANIMO A TODOS
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