La vergüenza sin fin

Era de suponer que el destructor firmaría su sentencia envenenada, putrefacta y maloliente, pero ni el mas pesimista de los blanquillos podía llegar a creer que la infamia superaría con creces la mas calenturienta de las ficciones imaginables en una mente enferma.
La pandilla de jetas que están haciendo el trabajo sucio del inepto destructor de nuestras ilusiones superan en ignorancia, ineptitud y desvergüenza a su maestro y guía espiritual.

Ni millones, ni plan deportivo, ni plan económico, ni oro, ni moro, ni paquistaní ni ¡vergüenza!;  se atreven a solicitar la solvencia de la que carecen;  se atreven a poner en entredicho a mitos del Zaragocismo, a callar cuando mas falta hace hablar, a divagar cuando lo que de necesita es firmeza.    Y aun preguntan como llenar la Romareda:  ¡¡ Marchándose todos ellos, uno detrás de otro.!!

Espero que la presencia de estos hologramas humanos solo sea un mal sueño, preludio de una siesta reparadora, y en breves podamos, aunque sea en 3ª división, disfrutar de un equipo en el que podamos reflejarnos todos, y sobre todos, reflejar a nuestros hijos.

MENUDA CUADRILLA DE JETAS !!!!!