viernes, 24 de marzo de 2017

Suerte Cesar

Eliminada una parte sustancial del problema, la pertinaz incapacidad de un sorprendente técnico, llega la hora de demostrar la valía de uno de los nuestros, uno de los que comparte con nosotros el corazón Zaragocista y sabe, como cualquiera de nosotros, lo que sentimos, queremos y pensamos.

Suerte a este Zaragoza en deprimente caída libre, abandonado a su suerte por la cúpula, cegado de indolencia en el cuerpo técnico y abatido por la incomprensible parsimonia de sus jugadores. 

Cesar, ¡estamos contigo!

No hay comentarios: